- Con el cierre de diciembre, el euríbor ha registrado un promedio de 2,435%, lo que representa una disminución de 0,07 puntos porcentuales en comparación con noviembre. Esta cifra consolida la tendencia bajista que el indicador ha mostrado de manera ininterrumpida durante los últimos nueve meses.
- El euríbor ha experimentado una caída histórica en diciembre, disminuyendo 1,244 puntos en comparación con el mismo mes del año anterior, la mayor bajada para un mes de diciembre desde 2012.
¡Buenas noticias para los hipotecados! El Euríbor ha alcanzado su nivel más bajo en 12 años, lo que significa que las cuotas mensuales podrían reducirse considerablemente.
Impulsado por los recortes en los tipos de interés del Banco Central Europeo, el euríbor, como índice al que están vinculadas la gran mayoría de las hipotecas a tipo variable, ha registrado una nueva caída en diciembre. Lo que se traducirá en un alivio para los bolsillos de los hipotecados.
Nueve meses de caídas consecutivas: El euríbor cierra diciembre en 2,435%
En comparación con el mismo mes del año pasado, el euríbor ha caído de manera drástica. De hecho, ha registrado una disminución de 1,244 puntos, la más pronunciada para un mes de diciembre desde el año 2012.
Aunque es importante mencionar que, la velocidad a la que ha bajado se ha ralentizado en comparación con meses anteriores. Pero, las consecuencias positivas para las finanzas familiares continúan siendo significativas.
Ahora, con diciembre casi terminado, el euríbor ha registrado una media de 2,435%. Bajando 0,07 puntos respecto a noviembre y continuando con su tendencia bajista de los últimos nueve meses.
¿Qué significa esto para los hipotecados?
En principio, los titulares de hipotecas variables con revisión anual en enero del próximo año tendrán motivos para celebrar.
De acuerdo con los datos registrados por Kelisto.es, las hipotecas medias en el país experimentarán una disminución mensual de más de 101,53 euros. Lo que representa un ahorro anual superior a 1.200 euros, pues se espera una rebaja de al menos 12%.
Sin embargo, cabe resaltar que el ahorro generado por la bajada del euríbor variará en función de factores como el importe de la hipoteca, el plazo de amortización y la fecha de revisión. Por ejemplo, una hipoteca de 100.000 euros podría experimentar una reducción mensual de 67 euros. Mientras que una de 200.000 euros podría ahorrar 135 euros al mes.
Pero, incluso aquellos con revisiones semestrales experimentarán un alivio considerable en sus bolsillos. Con una reducción de la cuota mensual de 82,44 euros y un ahorro semestral de 9,56% sobre la cuota anterior.
En consecuencia, se puede decir que la disminución del euríbor se traduce directamente en una reducción de las cuotas mensuales a pagar por las hipotecas a tipo variable. Esto supone un alivio económico significativo para muchos hogares españoles, especialmente en un contexto de creciente inflación y encarecimiento de la vida.
Además, la reducción de las cuotas hipotecarías contribuye a aumentar la estabilidad financiera de los hogares. Esto, al disminuir la carga de la deuda y liberar capacidad de endeudamiento para futuras inversiones o proyectos. Por lo que los hipotecarios deben aprovechar este 2025 para ahorrar o invertir su capital inteligentemente.
¿Qué factores pueden influir en la evolución futura del euríbor?
Lo cierto es que, la evolución futura del euríbor dependerá de diversos factores, por lo que todo podría cambiar para 2025.
En primera instancia, las decisiones del Banco Central Europeo, en materia de tipos de interés. Pues serán determinantes para la evolución del euríbor, ya que sí el BCE continúa con su política expansiva, es probable que el euríbor siga disminuyendo.
Sin embargo, la inflación también podría influir en las decisiones del BCE y, por tanto, en el euríbor. Si la inflación se mantiene elevada, el BCE podría verse obligado a subir los tipos de interés para controlarla, lo que tendría un impacto alcista sobre el euríbor.
Y finalmente, la situación económica europea y mundial. Recordando que una desaceleración económica podría llevar al BCE a adoptar medidas más expansivas, mientras que un crecimiento económico robusto podría favorecer un endurecimiento de la política monetaria.
Ahora, con estos datos en mente, las previsiones apuntan a que el euríbor seguirá descendiendo en 2025. Incluso alcanzando niveles cercanos al 1,75% a finales de año, debido a las futuras reducciones de los tipos de interés por parte del BCE.
Pero esto sucederá, siempre y cuando el euríbor se ubique alrededor del 2% en la segunda mitad del próximo año.
Sin embargo, la trayectoria futura de los recortes de tipos del Banco Central Europeo (BCE) estará estrechamente vinculada a las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Por lo que hay que prestar atención a los acontecimientos.
Sobre todo, a la persistente inflación en Estados Unidos, aunada a las posibles medidas proteccionistas del gobierno estadounidense. Pues podrían llevar a la Fed a adoptar una postura más cautelosa en cuanto a las bajadas de tipos, lo que, a su vez, obligaría al BCE a actuar con mayor prudencia. Esto, para evitar una depreciación excesiva del euro que pudiera generar inestabilidad financiera y perjudicar las exportaciones europeas.
